Anuario Digital de Investigación del Posgrado de Urbanismo

El Posgrado en Urbanismo de la Universidad Nacional Autónoma de México nació en 1967 en el seno de la Escuela Nacional de Arquitectura, con la creación de la primera maestría en urbanismo en México, concebida entonces como una especialización de la práctica arquitectónica. En ese momento fundacional se reconocieron dos tendencias: una enfocada al arte urbano apoyada por Domingo García Ramos y otra basada en la planeación urbana encabezada por Enrique Cervantes, la cual prevaleció sustentada por la práctica profesional dominante. Desde entonces se han formado en el posgrado decenas de generaciones de docentes, investigadores, consultores y funcionarios que han contribuido en diversos ámbitos a consolidar una disciplina y un campo profesional que busca en esencia mejorar las condiciones de vida en las ciudades. Desde el principio atrajo a profesionales de otras disciplinas: economistas, sociólogos, geógrafos, abogados, ingenieros, entre otros, quienes compartían esta preocupación y la necesidad de profundizar en el conocimiento del fenómeno urbano. Además el prestigio de nuestra máxima casa de estudios y las facilidades que existían para el intercambio académico permitieron también que a partir de esos primeros años participaran colegas de otros países de América Latina.

Eran tiempos convulsos, abiertos al debate, en los cuales las posturas ideológicas y políticas se discutían en las aulas universitarias. Así, en la primera década de vida de nuestro posgrado surgieron nuevas propuestas académicas que incorporaron visiones alternativas al de la planificación institucionalizada en 1976 cuando se decretó la Ley General de los Asentamientos Humanos y se creó la Secretaría de Asentamientos Humanos y Obras Públicas (SAHOP). En un esfuerzo de síntesis, estas visiones alternativas podríamos englobarlas en los conceptos de urbanismo social, participativo y sostenible, que hoy están arraigados en el discurso y práctica urbanística.

En este contexto el grupo docente que había fundado la maestría se cohesionó en torno al campo de conocimiento de desarrollo urbano y regional, mientras que las iniciativas emanadas de la escuela de autogobierno se integraron en el Programa de Investigación y Docencia, del cual años más tarde se derivaron los campos de Análisis, Teoría e Historia, Economía, Política y Ambiente. Posteriormente en la década de los noventa, un grupo de profesores de la especialidad en Valuación inmobiliaria crearon el campo de Desarrollo inmobiliario.

Como se ha apuntado, la diversidad de enfoques e ideologías han caracterizado a la comunidad académica del Posgrado en Urbanismo. Esta diversidad es una de sus principales riquezas entendida como condición propicia para el diálogo interdisciplinario y para la vocación transdisciplinaria que define al urbanismo.